Vuelta al “cole” 100% segura
El 90% de los accidentes ocurren en los momentos de subida y bajada del autobús, siendo la mayoría atropellos por distracción.
La Dirección General de Tráfico (DGT), a través de una guía para la prevención de accidentes en el transporte escolar, recuerda, especialmente a padres y niños, ante la finalización de las vacaciones de verano y el comienzo del curso escolar, cómo deben viajar en el autobús escolar de forma segura.
El autobús es uno de los medios de transporte más seguros para viajar y el más utilizado por los menores para desplazarse al centro escolar. En España, cerca de 17.000 autobuses (un 40% de la flota privada) realiza servicios de transporte escolar. El 90% de los accidentes ocurren en los momentos de subida y bajada del autobús, siendo la mayoría atropellos por distracción. La DGT, por esta razón, pretende conseguir que los trayectos cotidianos se hagan con las mayores garantías de seguridad posibles.
Normas y condiciones técnicas que los padres deben saber y exigir
El transporte de menores tiene una especial relevancia debido a la inseguridad de sus usuarios, que cada vez son de edades más tempranas. El Real Decreto 443/2001, de 27 de abril establece las condiciones de seguridad en el transporte escolar y de menores, donde se tratan aspectos como antigüedad de los vehículos, características técnicas, inspección… La Fundación CEA recuerda cuáles son esas normas y el papel tan importante que tiene el padre o tutor para comprobar la seguridad del autobús escolar y, sobre todo, para exigir el uso del cinturón de seguridad.
• No rebasar los 16 años de antigüedad.
• Ir señalizado con el indicativo de transporte escolar en la parte anterior y posterior del vehículo.
• Documentación: En ella debe figurar que ha superado una inspección técnica anual, si tiene menos de 5 años, y semestral si supera esa antigüedad; que dispone de un seguro obligatorio y otro complementario que cubra la responsabilidad civil por daños y perjuicios; y contar con una autorización especial para el transporte escolar.
• El autobús debe disponer de plazas para personas con discapacidad.
• El piso del vehículo no puede ser deslizante y los bordes de la escalera deben ser de colores vivos.
• Las puertas deben disponer de barras para facilitar las operaciones de subida y bajada.
• Los asientos ubicados frente a huecos de escalera, o aquellos que no estén protegidos por el respaldo de otro, deben contar con un elemento fijo de protección. Si estos asientos van ocupados por niños de 5 a 11 años, los cinturones tendrán tres puntos de anclaje y dispondrán de cojines elevadores.
• La duración máxima del tiempo de viaje en cada sentido no debe exceder 1 hora.
Obligatorio el acompañante
Es obligatoria su presencia en los transportes públicos escolares en donde al menos la tercera parte tuviera una edad inferior a 16 años, y siempre que se transporte a menores con algún tipo de discapacidad.
Consejos para el menor
A diario el autobús se convierte en el medio de transporte de muchos niños, por eso es conveniente que aprendan a evitar situaciones de riesgo y que conozcan los posibles peligos con los que se pueden encontrar. No deben olvidar en ningún caso:
• Antes del trayecto: llegar 5 minutos antes de la salida; esperar en la parada, si existe, y si no, hacerlo en un lugar seguro; los más pequeños deben ir siempre acompañados y no se debe jugar cerca del bordillo o empujar a los demás.
• Durante el trayecto: Llevar el cinturón puesto; no levantarse y no gritar o alborotar; obedecer al conductor y al acompañante; no arrojar papeles y desperdicios en el autobús y no producir daños.
• En paradas y arranques: No correr para bajar y hacerlo por la puerta que corresponda sin empujar a los demás; alejarse como mínimo 2 metros y a un lugar seguro, teniendo cuidado con el tráfico; no agacharse debajo del autobús, ni ponerse al lado del mismo; y nunca cruzar la calle por delante ni por detrás del autocar, sino por los lugares autorizados y con precaución en todo caso.