Conducción temeraria y negligente: ¿Qué es y qué sanciones puede acarrear?
Cuando leemos o escuchamos la palabra “conducción temeraria” o “conducción negligente” la asociamos en la mayoría de casos a acciones en las que generamos un riesgo al viandante por exceso de velocidad o conducir bajo los efectos del alcohol y las drogas. Pero conducir de manera temeraria va mucho más allá de esos motivos, ya que hablar por el móvil mientras conduces o enviar un Whatsapp supone una temeridad tanto para el conductor como para el resto de personas que se encuentra en la vía.
No es necesario comentar que este tipo de conducción puede tener consecuencias fatales para todos, por lo que en Autoescuela Ayala recomendamos fervientemente respetar las normas de circulación y mantener una actitud responsable mientras se conduce, puesto que tu vida y la de muchas personas están en juego.
¿Qué es la conducción temeraria?
La conducción temeraria hace referencia al comportamiento inadecuado de los conductores que circulan por la carretera generando riesgo a la integridad física de los ocupantes de su vehículo y de todas las personas que circulan en la carretera. Circular a velocidad superior a la permitida, con unas copas de más, en sentido contrario o chocando con otros conductores son claros ejemplos de este tipo de conducción, que son sancionadas por las autoridades con multas económicas importantes y pérdida de puntos en el permiso de conducir. En este caso las infracciones pueden llevar consigo una multa de 500€, con la retirada de 6 puntos del carnet de conducir.
¿Qué es la conducción negligente?
La conducción negligente se diferencia de la temeraria en que conlleva la omisión o falta de cuidado y atención necesarios para evitar daños propios o ajenos. Derrapar en la carretera, conducir de manera deliberada haciendo eses o distraerse a posta mirando el paisaje son claros ejemplos de neglicencia. En este caso las infracciones pueden llevar consigo una multa de 200€, pero no supone la retirada de ningún punto del carnet.
¿Puedo ir a la cárcel por conducción temeraria o negligente?
La respuesta es SÍ. Aunque muchos de los irresponsables que realizan ese tipo de acciones no son conscientes, conducir de manera negligente o temeraria puede ser denunciado por la vía penal, con la posibilidad de entrar en prisión por ello.
Tal y como dicta el artículo 360 del Código Penal este tipo de conducción supone un “peligro grave, real y específico para la integridad de terceras personas.”
Es en estos casos es cuando actúa la Ley de Enjuiciamiento Criminal, que contempla penas de prisión que varían de 6 meses a 2 años de cárcel, así como la prohibición de conducir vehículos a motor durante al menos 1 año y hasta un máximo de 6 años.
En definitiva, lo que pretendemos con este artículo es concienciar a nuestros lectores de las graves consecuencias de conducir de manera incívica, acto de concienciación que realizamos en todas y cada una de nuestras clases.
Conduce de forma segura. Por ti, por tus acompañantes y por todos.